El frío viene en camino y con él las tardes de películas tapados con una frazada o quizás un libro, con un chocolate caliente y las rutinas de siempre. Como sabemos que en esta época a todos nos gusta acostarnos a una hora, digamos razonable, te vamos a dejar algunas ideas para que irse a dormir cueste un poco menos. Y es que la lógica es que si nuestra habitación luce acogedora y cálida, seguro nos vamos con otro ánimo a la cama. Apunta estos 5 DIY: 'Do It Yourself', que en castellano sería “Hazlo Tú Mismo”, para adornar tu dormitorio pensando en estos meses más helados.
#1. Un cabecero que abrigue tus sueños
Con los días más cortos en invierno, las ganas de irse a la cama siempre son más potentes y la energía más escasa que en épocas donde gozamos de vitamina D. Por lo mismo ¿Qué mejor que pasar las últimas horas del día en la tranquilidad de tu habitación apoyado sobre una confortable cabecera, en vez de estar incómodo en la sala de estar o en el living? Los de obra pueden resultar muy fríos estos meses, así que vamos a darle un giro con esta propuesta para que sean mucho más calentitos y blandos para regalonear a nuestras pobres espaldas.
¿Qué necesito para hacerme una cabecera así de cómoda?
- Listones de madera
- Espuma de tapicería
- Pistola de grapas
- Taladro y destornillador
- Tornillos, anclajes de pared
- Cordones, cinta de cuero y tijeras
¿Por dónde empezamos?
Lo primero es formar esa cabecera blandita a base de la espuma de tapicería y la tela. Recuerda que los listones se deben cortar a 90 grados, para que calcen unos con otros perfectamente. Cuando ya lo tengas, fija las tiras de cuero. Ahora atornilla las otras tiras a la pared directamente o a un listón de madera (que podrás pintar o dejar al natural). Y terminas tu extraordinario trabajo, uniendo la nueva cabecera a la pared gracias a la cuerda. ¡Ya está! ya tienes un apoyo acogedor y abrigadito.
#2. Una corona que abrigue la pared
¡Tranquilos! Ya sabemos que queda muchísimo para la Navidad. Pero, mientras llega ese momento, quédate con este tutorial para crear una bonita corona con la que podrás adornar tus más increíbles sueños ¡Puede quedar preciosa en tu respaldo o donde tú quieras!
Para hacerla necesitaremos:
- Un aro de metal
- Alambre fino
- Fieltro de colorines (mejor si son los colores típicos del invierno) o flores secas
- Lápiz, tijeras y una pistola de silicona caliente
¿Cómo se hace esta corona tan mona?
Comienza dibujando las hojas sobre el fieltro o haciendo flores de papel (si no las tienes secas). Como queremos que el color aporte calor, lo que hacemos es elegir tonos relacionados con la tierra: ocre, beige, marrón o gris. Ahora que ya lo tienes, corta el alambre a 12 cm y pega las hojas o las flores a uno de los extremos del cable con ayuda de la silicona caliente. Una vez que tengamos todas pegadas, iremos enrollando cada alambre y sus dos hojitas al aro principal. ¡Así de rápido y así de elegante!
#3. En clave boho
El estilo más desenfadado de todos sigue dando mucho de qué hablar en decoración. Si te gusta esta tendencia, estamos seguros de que este "tuneo" te va a encantar. Partiendo de una funda de cojín súper básica y usando un poco de lana, conseguimos una pieza única que invita a acurrucarse en ella.
¿Qué necesitamos para fabricar nuestra funda boho?
- La funda (¡Of course!)
- Lana negra o del color que quieras
- Aguja de bordar y tijeras
¿Cómo se hace?
Comienza cortando una hebra de lana y cosiéndola en el punto en el que vas a empezar el dibujo. Ve pasando el hilo por el dibujo que previamente hayas marcado en el cojín, procurando juntar bien las puntadas. Cuando hayas terminado, con la misma lana repasa todos los bordes: ¡Fin del trabajo!
#4. Más madera
Siguiendo con la idea de sumar confort a nuestro descanso, este DIY nos enseña a vestir en madera un respaldo económico y súper simple. También toma en cuenta que con esta misma idea, además de la cabecera de la cama podemos forrar la pared entera, o incluso la superficie de una mesilla o cómoda que ya no nos aburrió su estilo.
Para fabricarte uno igual necesitas:
- La base de la cabecera básica
- Listones de madera o baldosas vinílicas
- Sierra de calar
- Adhesivo de montaje
- Spray de poliuretano (opcional)
Te explicamos cómo se hace:
Dependiendo de si los listones son de madera natural o de imitación, el proceso se desarrollará igual, pero tendrá una terminación distinta. En el caso de la baldosa o listón vinílico, un vez cortadas y pegadas todas las piezas haciendo el dibujo o diseño que queremos, ya tendremos terminado todo el proceso. En cambio, en el caso de la madera natural o tratada, si se hace recomendable que terminéis el DIY, dando una capa de spray de poliuretano para unificar la superficie (y evitar después manchas por culpa del tinte). Luego no nos digas que no te hemos avisado...
#5. Un lavado de cara a las mantas
Aunque te guste el estilo nórdico o minimalista, usar una mantita a los pies de la cama queda muy chic y puede resultarte muy práctico si sueles trabajar sentado en la cama con el pc, o te gusta ver la TV. Deja una manta cerca y te la podrás echar por los hombros (que siempre se quedan helados). Puedes personalizar una manta y hacerla un poco más especial, o bien subir a nivel "Pro" y hacértela desde cero. ¿Te animas?
Para hacer la mata con borlas necesitas:
- Tela de punto o una manta ya confeccionada
- Lana de 4 tonos de gris (si ese es tu color)
- Tijeras
- Hilo de algodón crudo, aguja y un cuadrado de cartón
¿Por dónde empezamos?
Comenzamos fabricando la manta si no la tienes. Para eso te dejamos en la lista de materiales la tela de punto. Sólo tienes que hacerle un dobladillo y con punto festón ir remontando los lados. No era tan difícil ¿No? Ahora nos ponemos a fabricar las borlas con ayuda del cartón. ¿Te acuerdas de cuando aprendiste esto de pequeño? Enrolla la lana dando vueltas al cartón. Atas arriba con una tira de lana y un nudo y cortas abajo. Ahora decoras con otro trozo de lana que le de la forma de cabecita. ¿Lo tienes? Haz lo mismo con todos los tonos de lana que has comprado y termina cosiendo cada borla a tu manta. Puedes poner una en cada esquina o llenarla entera. Al fin y al cabo, es tu obra y nadie te va a decir cómo la tienes que personalizar.
¿Qué te parecen estos DIY tan calentitos? ¿Te animas a darle un nuevo look a tu dormitorio de cara al invierno? Cuéntanos cómo te quedan en los comentarios.