5 trucos para tener la mampara de la ducha siempre limpia

Quizás te parezca una tontería, pero lo cierto es que hacer esta costumbre una rutina y llevarla a la práctica, puede ser clave para mantener la mampara de la ducha lejos del moho y la humedad. Además es tan sencillo como pasar una toalla por el cristal después del baño o la ducha y retirar el excesos de humedad. Aunque la limpieza en profundidad de la mampara la realicemos una vez a la semana, este simple hecho puede hacer que se acumule mucho menos polvo, ácaros y humedad. También es importante ventilar el baño después de su uso. 

Es importante saber el material de nuestra mampara, para determinar el cuidado y mantenimiento de ésta. Si la mampara es de plástico, debes cambiar los consejos anteriores por este otro: utiliza amoniaco para combatir las manchas, la suciedad y el moho. Lo puedes utilizar en los carriles y en las hojas de la mampara. Cuando lo hagas, abre las ventanas para evitar inundar el baño con el olor.

Finalmente, uno de los mejores consejos que podemos ofrecer para disfrutar de una mampara limpia, es tratar de mantener la limpieza de la misma a diario. Si tomamos como costumbre el siguiente consejo, nuestra mampara estará libre de suciedad de forma más evidente. Cada tres o cuatro días, utiliza un spray con zumo de limón y échalo tanto en la mampara como en el carril. El limón es un ingrediente natural perfecto para eliminar las bacterias, y así no saldrá el temido moho que no sólo es muy molesto a la vista, sino también, puede traer repercusiones a la salud.